La parroquia proporciona el ministerio de duelo para ayudar a la familia cuando fallece un ser querido. El ministro de duelo extiende las condolencias de la parroquia y ayuda a la familia a planificar una liturgia fúnebre que será una fuente de consuelo y fortaleza. Los miembros de la familia trabajarán con el ministro de duelo para seleccionar las lecturas de las Escrituras, la música y los participantes en la liturgia. Se utiliza un folleto llamado “De la muerte a la vida” para ayudar con la preparación de la liturgia.

El ministro también estará disponible en la misa fúnebre para ayudar a la familia. Durante la Misa, los miembros de la familia tendrán la oportunidad de participar en ministerios como lectura, portadores de obsequios y presentación de comentarios de la familia al final del servicio.