El nacimiento de un niño es un acontecimiento importante en la vida de una familia. Nadie tiene más influencia en el creciente sentido de Dios y de la comunidad de fe católica de un niño que los padres del niño. Es por esto que la Iglesia Católica considera a los padres los primeros maestros de un niño. El primer paso de la iniciación en la Iglesia Católica es el Sacramento del Bautismo. El bautismo nos hace partícipes de la propia vida de Dios y nos acoge en la familia de Dios. En el bautismo, la fe es proclamada a los niños por sus padres y padrinos, que representan a la Iglesia. Utilizando la fórmula trinitaria, “En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo”, el niño es bautizado con agua y queda limpio del pecado original. El bautismo nos une a Cristo porque nos incorpora a la Iglesia. San Pablo lo describe como estar “revestido” de Cristo. Es a través de la Iglesia que conocemos a Jesús y crecemos en nuestra capacidad de reconocer su presencia entre nosotros en las Escrituras, en la fracción del pan y en la Asamblea.

Para bebés y niños menores de 7 años: El Sacramento del Bautismo para bebés y niños se celebra en varios momentos del año. La Parroquia tiene un calendario de fechas entre las que las familias pueden seleccionar. Los padres y padrinos deben asistir a una sesión de preparación sacramental antes de la fecha del bautismo. Para obtener más información y ver el cronograma de fechas de clases –Horario Bautismal – 2023. Los padres deben comunicarse con la oficina parroquial para registrarse en la clase de preparación bautismal. Luego será contactado por el Coordinador de Preparación Bautismal quien responderá cualquiera de sus preguntas y le explicará el proceso.

Para niños de 7 años a adolescentes: los niños de este grupo de edad que asisten a escuelas públicas o reciben educación en el hogar deben asistir al Programa Parroquial de Formación de Fe con sus compañeros en entornos apropiados para su edad. En este programa, los niños aprenden sobre la belleza de la fe católica y se preparan para los sacramentos. Si los niños asisten a una escuela católica, comuníquese con el Coordinador de Formación de Fe para obtener más información o llame a la oficina parroquial para registrarse para una clase de bautismo.

Para adultos: Los adultos mayores de 18 años que deseen ser bautizados participarán en un proceso llamado “Convertirse en católico”. Este proceso conduce a la participación en el Rito de Iniciación Cristiana de Adultos. Para obtener más información, comuníquese con el coordinador de “Convertirse en católico”.

Clase de preparación bautismal

La Clase de Preparación Bautismal consiste en una reunión de una hora y media que se ofrece el primer jueves de cada mes en inglés y español. Para obtener un calendario completo de clases: Horario de Bautismo 2023. Antes de asistir a la clase, los padres deben comunicarse con la oficina parroquial y hablar con el coordinador de preparación bautismal para registrarse.

La clase incluye el desarrollo de una comprensión del Sacramento del Bautismo, incluidos los significados de los símbolos del agua, el aceite, el cirio bautismal y el manto blanco. Los participantes también discutirán su papel como padres en la crianza de los niños en la fe y en la construcción de esperanzas y sueños para el camino de fe de su hijo. Las familias también aprenden y se les anima a participar integralmente en nuestra familia parroquial, haciendo de la Basílica de San Pablo su hogar lejos del hogar.

Consideraciones preliminares

Antes de asistir a la clase de preparación bautismal, los padres deben considerar en oración su papel en la crianza de sus hijos como cristianos. En el sacramento del Matrimonio, los padres hacen la promesa de aceptar amorosamente a los hijos de Dios y educarlos según la ley de Cristo y su Iglesia. A través de la celebración del Sacramento del Bautismo, los padres cumplen con sus compromisos sacramentales. Si los padres del niño a bautizar no están casados en la Iglesia Católica, deben comunicarse con el pastor para considerar hacerlo. Si por cualquier motivo los padres no están casados, o no están casados por la Iglesia Católica, el niño podrá ser bautizado siempre y cuando los padres se comprometan a criarlo en la Iglesia Católica. Ambos padres biológicos deben firmar un formulario dando su consentimiento para bautizar al niño.